Viajar en avión, especialmente si es de larga distancia, puede conllevar determinadas situaciones que pueden afectar negativamente a la salud de los pasajeros. Los pasajeros con ciertos problemas de salud en el pasado pueden verse más afectados por estas condiciones. Por ejemplo, la presión del aire de la cabina puede causar molestias a las personas con ciertas condiciones de salud, incluso si el nivel de oxígeno se ajusta para personas sanas.

Situaciones en las que no se deben realizar viajes aéreos

1. Bebés que tienen menos de 7 días.

2. Mujeres dentro de las últimas 4 semanas de embarazo (8 semanas en embarazos múltiples) y dentro de los primeros 7 días después del parto.

3. Dolor torácico o angina de pecho que se siente incluso en reposo

4. Los que padezcan alguna enfermedad grave y contagiosa.

5. Aumento de la presión intracraneal debido a hemorragia, trauma e infección.

6. Infección de los senos paranasales, infecciones de oído, nariz y garganta (especialmente si la trompa de Eustaquio está bloqueada).

7. Infarto de miocardio reciente y crisis.

8. Enfermedad respiratoria crónica grave, disnea en reposo o neumotórax no resuelto.

9. Aquellos con anemia de células falciformes

10. Hipertensión arterial no controlada con presión sistólica superior a 200 mmHg

11. Una intervención quirúrgica reciente o una situación de daño donde queda atrapado aire o gas (especialmente trauma abdominal, cirugías gastrointestinales, lesiones en la cabeza, la cara y los ojos, cirugías cerebrales y cirugías oculares en las que se ingresa al globo ocular).

12. Los buceadores no deben realizar viajes aéreos de corta duración después de bucear: (al menos 24 horas después de varios días de buceo sin restricciones, al menos 12 horas después de bucear 2 horas)

Las enfermedades que requieren viajar en avión en consulta con el médico son las siguientes:

1. Cáncer,

2. Trastorno cardiovascular,

3. Enfermedad respiratoria crónica,

4. Epilepsia,

5. Anemia

6. Diabetes inestable

7. Aquellos que toman terapia con medicamentos inmunosupresores

8. Dependiente de diálisis

9. Aquellos con EM

Las personas que tengan dudas sobre viajar debido a las enfermedades anteriores o cualquier otra razón deben consultar a un médico antes de decidir viajar en avión. En caso de duda, la aerolínea puede solicitar una condición médica. Todos los medicamentos que se vayan a utilizar durante el viaje y en el destino deben llevarse en un bolso de mano y mantenerse en un lugar de fácil acceso en todo momento. Además, las personas con alergias alimentarias graves deben tener cuidado con la comida que se sirve a bordo.